Crear una imagen de nuestra empresa va más allá de diseñar un logo atractivo alrededor de un nombre ingenioso. Con la revolución que ha supuesto Internet, muchos empresarios han basado su estrategia comercial en la creatividad a la hora de publicitar su negocio, buscando un impacto inmediato en un medio que nos permite diversificar los proyectos a niveles imposibles de alcanzar desde otras plataformas. Pero nuestra empresa debe ser más que un bonito icono, ya que tiene que transmitir una impresión completa, en la que la imagen que hayamos trabajado sea nuestra mejor carta de presentación. Con tanto valor que el mero recuerdo se asocie a una serie de valores en consonancia con nuestro negocio.
Comprendiendo el alcance de la marca
Si nos pidiesen hablar sobre empresas de un determinado sector, rápidamente nombraríamos unas pocas asociándolas a elementos que van más allá de las palabras. Puede ser un símbolo o eslogan conocido, pero también puede ser algo tan indeterminado como un color o, incluso, una ideología. La clave de las marcas es su forma de introducirse en la mente de las personas. Crean sus propios espacios dotándolos de una serie de partes que encajan unas con otras, para arrojar un resultado mayor que la mera suma por separado. Tenemos mucha más información de la que pensamos sobre las empresas más conocidas, por lo que te podemos proporcionar una serie de datos, en apenas un minuto de reflexión, que te asustarían, por lo precisos que pueden llegar a ser.
Y es que ese es el matiz que debemos lograr. Nuestra empresa debe transmitir un conjunto global de elementos. Podemos comenzar con definiciones sobre nuestros servicios junto a productos asociados a la actividad que realicemos, pero también podemos mostrar el valor humano de nuestro negocio. En las redes sociales, anunciaremos la empresa, incitando, al mismo tiempo, a nuestros seguidores a que interaccionen con nosotros en asuntos relacionados, sin que necesariamente acaben en una transacción comercial. Es en este punto cuando la marca cobra auténtico significado y dota al logo del que inicialmente hablábamos de sentido para cualquiera que lo observe. Conocen el nombre de nuestra empresa, así que hagamos que ahora conozcan, de verdad, a la empresa.
El branding de empresa
Uno de los términos más extendidos durante los últimos años, el branding, es la construcción completa de la marca que representa a nuestra empresa. El matiz que añadimos, al dotar de un factor global al proceso de construcción, no es arbitrario. En esta disciplina, se busca, desde sus inicios, conseguir que todos los aspectos relacionados con la marca de nuestro negocio, trabajen al unísono y logren resultados que, por separado, serían imposibles. Del mismo modo que comprendemos el auténtico valor de la marca, al ser parte de la mente de nuestros clientes, tenemos que disponer de una herramienta que nos permita conectar de forma activa con dichas personas. El branding es el encargado de dicha tarea y diferencia nuestro producto con cualidades que van más allá de su calidad o coste inherentes.
Existen muchos aspectos en el branding a estudiar, desde la creación de la propia marca y hasta los medios en los que la transmitiremos. La clave del branding es conseguir que nuestra empresa se diferencie claramente del resto. Destacar por delante de la competencia y aportar un servicio tan personal que va más allá de nuestro propio modelo de mercado. Conocemos a nuestro público y sus inquietudes y deseos, lo que hace que la marca que representa nuestra empresa aporte valor a dichos elementos. Cuando asociamos vivencias personales y opiniones a una determinada marca empresarial es cuando podemos decir que el branding de dicha empresa ha tenido éxito: la conocemos por cómo es y no por lo que nos dice que supuestamente es.
Dar a conocer nuestro negocio al mundo
Como es de suponer, conseguir que nuestra marca tenga éxito a través del branding requiere unas dosis de creatividad importantes. Destacar en el mercado no es fácil. Es por ello que, ahora que conocemos la importancia de cuidar los valores que transmite nuestra empresa, debemos estar seguros del rumbo a tomar con nuestras campañas de publicidad. Recurrir a profesionales del branding es un paso fundamental para alcanzar nuestros objetivos. Es una parte más del marketing, que traspasa las propias barreras de la Red, para adentrarse en las opiniones del público. Con sensaciones que requerirán análisis más allá de los arrojados por las herramientas de estudio.
En Amundsen, sabemos lo importante que es lograr transmitir el mensaje correcto para una empresa. Como agencia de diseño y publicidad, buscamos, en todo momento, la solución que más encaje con tu proyecto de negocio, en un marco en el que la flexibilidad y adaptación son las mejores referencias para alcanzar un branding auténticamente eficaz. Si quieres que tu empresa tenga una identidad propia capaz de transmitir los valores más acordes con tu idea de negocio, contacta con nosotros y te ayudaremos a diseñar las campañas de publicidad que logren dar el impulso necesario a tu negocio.